La obra Amor y control, un tributo a la sala continental de la compañía teatral Los Lunáticos de Valencia, estado Carabobo, se presentó este sábado en Teatro Catia como parte del tercer Festival Internacional de Teatro Progresista de Venezuela.
Se trata de un montaje en el que se inscriben las letras de grandes recientes como Rubén Blades, Roberto Roena, Maelo, Héctor Lavoe, Oscar de Leon, Tito Rojas y la Dimensión Latina. El grupo viene trabajando en esta obra desde julio del 2023 y el escenario del festival fue propicio para su presentación por primera vez.
Surge de un proceso de creación colectiva y aborda el tema de la familia como eje fundamental, así como contenido y conflicto con historias que se acompañan con un tributo a este género, de acuerdo con Guillermo Vizcaya, director de la compañía, que ya tiene experiencia en el festival porque se ha presentado en las dos primeras ediciones.
Explicó que las letras de la salsa tienen un alto contenido social, sobre todo, la salsa que se inició con grupos como La Fania y algunas modernas que permanecieron con el hilo teórico de la vivencia, el amor y el control.
Es por eso que el nombre de la obra es una representación del tema de Rubén Blades, “Amor y Control”, ya que “encierra una estructura dramática importante y en la que él dice que viene saliendo de un hospital después de enterarse de lo de la mamá y eso es algo que en lo fundamental nos pega a todos y que por supuesto nos deja en el centro que es familia-familia”, indicó Vizcaya.
“Nosotros tenemos conciencia que hay elementos poderosos que necesitan destruir la familia como concepto fundamental de la sociedad en temas que tienen que ver incluso con transicionismo, que tienen que ver como yo me percibo; con unos temas que no tienen nada que ver con el tema de la familia, pero que sí buscan desestructurar la familia para poder acabar la estructura piramidal de control de una sociedad y una sociedad se identifica por el tema de la familia, es lo que le da identidad (…) Nosotros creemos que el teatro tiene que darle una mirada a la familia y es allí que hemos escogido este tema”, dijo.
Agregó que también se debe recuperar a salsa, algo que está en discusión con los contenidos de letras frágiles y dóciles que presentan otras propuestas musicales como el reggaetón que “tienen unos sonidos incluso pegajosos, pero que a veces tienen unos contenidos de letras que dejan mucho que desear y que nos empujan a la nada”, indicó.
En el grupo participan 18 personas, pero sólo 14 están en escena. “Estamos contentos con toda esta muestra, hemos estado viendo, no solamente nuestro trabajo en los ensayos, sino también los otros trabajos y creo que hay una buena convocatoria para que todo se sumen a un arte que aunque venga la inteligencia artificial, aunque que se aparezca lo que se aparezca, jamás vamos a poder ser sustituido porque el teatro está por encima de todas las cosas”, comentó.
El Festival Internacional de Teatro Progresista clausura este domingo 31 luego de 10 días de intensa programación en la ciudad de Caracas y los 23 estados. A esta tercera edición fueron invitados 20 países de Europa, Asia, África y otros de América Latina.
Prensa FITP